«Mea culpa» – Por Abisai Vázquez López.

La Nota del Día.

En la ultima década hemos sido testigos de innumerables casos de pederastia sacerdotal, donde el común denominador, ha sido el encubrimiento y omisión de la curia romana, que además a pagado sumas millonarias para resarcir a las víctimas y así tapar a todas luces la aberración mas grande de la Iglesia Católica.

No basta con solo dar un “MEA CULPA” (es una locución latina que significa exactamente “por mi culpa” y se menciona, generalmente, cuando una persona reconoce y admite un error o pecado). Como lo ha hecho el papa Francisco en algunas de sus visitas a países que han sufrido de este flagelo, haciendo de ello un “mea culpa colectivo”; no es suficiente con solo reconocer el problema y ofrecer una disculpa.

Tan solo en Irlanda, donde el año pasado el papa Francisco visitó y se reunió con ocho de las 14 mil víctimas de abuso sexual que desde 2002 acusan a sacerdotes de ese país. En el encuentro el papa comparo el encubrimiento de los abusos, al excremento humano.

En Alemania han sido documentados al menos 3.677 menores que sufrieron abuso en la Iglesia católica alemana desde 1946. En un documento filtrado a la prensa alemana detalla la escalofriante magnitud de esos crímenes.

El informe interno encargado por la Conferencia Episcopal alemana (DBK) y filtrado a la prensa indica que el abuso sexual a menores ha sido una práctica muy extendida en los últimos 70 años.

En Australia tuvo que ser el Primer Ministro Scott Morrison quien ofreciera una disculpa nacional a las víctimas de los abusos sexuales descubiertos tras una investigación de cinco años en su mayoría, en centros infantiles regidos por religiosos o por el Estado.

No obstante La Iglesia católica en Australia mantiene el secreto de confesión en casos de pederastia y se niega a aceptar una de las 409 recomendaciones de la comisión gubernamental que investigó los abusos sexuales a menores en el país que se refiere al secreto del sacramento de penitencia, a pesar de que recibió quejas de 4.500 personas por presuntos abusos de unos 1.880 religiosos y sacerdotes entre 1980 y 2015.

En España la Iglesia católica silencia desde hace décadas los casos de pederastia y se niega a facilitar datos de los procesos que ha conocido o instruido, incluso el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el cardenal Ricardo Blázquez, ha asegurado que no encargarán una investigación sobre los casos de abusos sexuales cometidos por sacerdotes en la Iglesia española en el pasado.

Negando con ello a que se habrán expedientes del pasado que revelen los casos de abuso sexual en la nación española, esto después de haber participado en la cumbre antipederastia convocada por el papa Francisco en la Ciudad de Roma el pasado mes de febrero.

En Italia un país en el que generalmente se ocultan estos abusos, a diferencia de otros países, donde por lo general se ventilan públicamente. En los últimos 15 años, han sido denunciados 300 sacerdotes por abuso de menores de edad, aunque solo entre 150 y 170 han sido condenados de forma definitiva, según datos de la asociación italiana Rete l`Abuso, defensora de víctimas de abuso sexual.

En Chile existen mas de 255 víctimas de abuso sexual por representantes de la Iglesia católica, siendo 148 investigaciones que la fiscalía chilena ha informado, desde el 2018 la Iglesia ha recibido numerosas denuncias de abuso sexual realizadas durante varias décadas.

La organización no gubernamental (ONG) estadounidense Bishop Accountability dio a conocer una lista de 78 clérigos acusados de abuso sexual contra menores de edad en Chile. Entre los involucrados figuran sacerdotes, diáconos y una monja.

En Argentina hubo por lo menos 63 denunciados en los últimos 20 años la Iglesia argentina ocultó durante años a sus sacerdotes y religiosos acusados de abuso sexual e inclusive el mecanismo implementado para este encubrimiento fueron, en muchos casos, los traslados, siendo esta una práctica habitual que los obispos los enviasen a otra jurisdicción sin alertar a las autoridades sobre la acusación.

En Colombia la fiscalía investiga 57 casos de pederastia en la Iglesia católica, las investigaciones están relacionadas con hechos ocurridos entre 2002 y 2018. De hecho recientemente el arzobispo de Cali debió pedir perdón público a cuatro víctimas de abuso sexual de un sacerdote condenado a 33 años de cárcel.

En Mexico el Episcopado Mexicano reconoce que 152 sacerdotes han sido suspendidos por casos de pederastia en los últimos 9 años, desconociendo el numero de víctimas, sin embargo la Red de Sobrevivientes de Abuso Sexual por Sacerdotes (SNAP, por sus siglas en inglés) tienen registrados 527 casos de menores violados por curas pederastas en México.

La mayor parte de los abusos se cometen a niños de entre 9 y 12 años de edad. Tan solo el sacerdote Nicolas Aguilar es señalado de violar entre 90 y 120 niños de entre cinco y 13 años en México y Los Ángeles California, Estados Unidos.

Las violaciones en México son posibles, gracias al trafico de pederastas, es decir, el cambio de una diócesis a otra que efectúa la Iglesia Católica cuando se entera de que hay un sacerdote pederasta.

En Canada hay reconocidos más de 150 mil casos de abuso sexual, según el reporte de la Comision de la Verdad y la Reconciliación dado a conocer por el Primer Ministro Justin Trudeau como uno de los mas obscuros capítulos de la historia de Canadá.Se estima que unos 150 mil niños indigenas internados en las residencias escolares, administradas por sacerdotes católicos, fueron objeto de abusos físicos, psicológicos y sexuales perpetrados por los mismos sacerdotes.

Ademas el reporte enumera seis mil testigos y tres mil 200 muertos como resultado, de lo que los aborígenes llaman un “genocidio cultural” contra sus niños.En Estados Unidos existe una lista negra 7.000 sacerdotes acusados desde 1950 de abuso sexual.

Luego de que la unidad de investigación del periódico Boston Globe, llamada «Spotlight» -la más antigua en los Estados Unidos- desenmascaró un escándalo en el año 2002 en el que la Iglesia católica de Massachusetts ocultó un número importante de abusos sexuales perpetrados por distintos sacerdotes de Boston, y por el cual el Globe ganó el Premio Pulitzer en la sección servicio público de 2003.

Recientemente en Pensilvania tras la presentación de un cruel informe que revelaba la existencia de más de 300 depredadores que habrían abusado de centenares de menores durante décadas, ante la mirada cómplice de los obispos.

El Departamento de Justicia Federal decide afrontar una investigación conjunta por pederastia clerical, luego de las demandas en lugares como: Filadelfia, Pensilvania, Nueva York, Nueva Jersey, Chicago, Washington o California, que solo habían sido afrontadas por las diócesis, o a lo mucho por los fiscales de cada Estado.

En California un reporte acusa a 80 sacerdotes de abusar durante mas de seis décadas, con la mirada complice de la diócesis de San Bernardino. Durante décadas San Bernardino fue el vertedero de sacerdotes, no solo de Estados Unidos, sino de todas partes del mundo para rehabilitarlos y luego enviarlos a otros estados y otros países. La diócesis de San Bernardino no ha revelado la lista completa de clérigos señalados de comportamiento sexual inadecuado, que aun siguen trabajando, no como sacerdotes, pero si como directores en escuelas preparatorias, según han afirmado los abogados de las víctimas.

La diócesis de San Bernardino no ha revelado la lista completa de clérigos señalados de comportamiento sexual inadecuado, que aun siguen trabajando, no como sacerdotes, pero si como directores en escuelas preparatorias, según han afirmado los abogados de las víctimas.

Son en todo el mundo mas de 100.000 casos documentados, que se conocen de pederastia sacerdotal por lo que la Iglesia católica ha desembolsado miles de millones de dólares en indemnizaciones a las víctimas en acuerdos extra judiciales.

El papa Francisco, empeñado en limpiar la imagen de la Iglesia con una política de mano dura contra la pederastia, convocó en febrero de 2019 a una cumbre con los presidentes de las conferencias episcopales de todo el mundo donde abordo el problema de los abusos a menores.

A pesar de ello la transparencia en su pontificado ha sido hasta ahora más bien escasa o nula, siendo para las víctimas una cumbre decepcionante, por la falta de acciones concretas en erradicar la impunidad y el abuso sacerdotal, no basta con solo reconocer el mal que aqueja a la Iglesia, sino de acciones concretas, no solo que eviten que esto siga sucediendo, sino que entregue el Vaticano a las autoridades de cada país, las listas de todos los clérigos acusados de abuso y ser sentenciados; si piensan que pidiendo perdón el problema va a acabarse, no es así. Queda mucho por hacer.

En la imágen: Abisaí Vázquez López.