«Incluso, los mejores analístas sociopolíticos y la misma sociedad en general, no entienden las estrategias ni lógicas en las acciones de Arias Solís».
Michoacán De Ocampo México. Enero del año 2021. Se podría determinar como un día muy «Productivo» para el Senador de la República Mexicana por el Estado de Michoacán, el Licenciado Cristóbal Arias Solís, quien en su amarga, caótica y caústica lucha en el largo trajinar por la vida política, por fín parece mirar la «Luz al final del túnel».
Arias Solís, sostuvo dos reuniones con diferentes actores políticos, con el fin de intercambiar impresiones e ideas para mejorar Michoacán; además, entre otros temas, delimitar ciertas «Estrategias», para enfrentar el proceso electoral del presente año 2021, en el que se competirá por el Solio de Ocampo.
Por inverosímil que parezca, el «Cachorro de Churumuco» -Que más que un apodo, el término ya se parece una mofa- aún tiene energía, para continuar inmerso en el paroxismo de la búsqueda frenética de una entidad que lo reciba en sus filas, sin importarle cuanto se siga deteriorando su figura ante sus «Correligionarios» y la sociedad en general, que no entienden este deambular cancino y errático entre políticosy partidos, que no tiene pies ni cabeza a todas vistas.
No está por demás recalcar que Arias Solís, en su medio siglo de político -Militando en varios partidos, incluso al parecer estrenará otro-, sí entiende perfectamente lo que son las «Negociaciones interpartidístas bajo la mesa» para lograr los objetivos personales de quienes ansían estar siempre en el poder, cueste lo que cueste, le pese a quien le pese y confundan a quien confundan.
La gran pregunta que se debe de hacer el Senador CAS, es ¿cómo le va a hacer para convencer a sus seguidores de que tienen que ir a dónde sus intereses le convengan?.
Por otra parte, quienes creen en el -Casismo-, se desconoce que actitud asumirán, cuando se les pida que voten por los colores y partidos, de los cuales, se les ha dicho hasta el cansancio, que son lo peor y que no compaginan en ideales ni lineamientos.
Este embrollo, laberinto, odisea, reto y acertijo político, sin duda alguna, sólo lo podrá solucionar, su majestad «CAS-FUCIO».
