SATURADA LA SALA DE ATENCIÓN «COVID-19» EN EL IMSS SUB CENTRO APATZINGÁN Y OTROS MUNICIPIOS.

«El martirio y sufrimiento inicia con  el contagio, secundado de la dolorosa e invasiva prueba del hisopo nasal, posteriormente someterse al tratamiento a tiempo y adecuado -Que requiere en situaciones menores oxigenación vía puntas o mascarilla- y, en el caso extremo ya con altos índices de mortalidad, la intubación, donde las posibilidades de recuperación son muy bajas».

Michoacán de Ocampo, México. Agosto del año 2021. Tal pareciese que todas las herramientas, metodologías, medidas preventivas y programas implementados por las Autoridades de salud, el Gobierno Federal, Estatal y Municipal, para prevenir los contagios por la enfermedad COVID-19, fueran una invitación a promover y propagar en sentido inverso esta problemática de salud pública.

Aunque paulatinamente se tendrá que buscar la forma de retornar a la «Normalidad», por ahora, las indicaciones de las Autoridades radican y puntualizan extremar todas las medidas de seguridad, higiene y sana distancia para lograr contener la 3er. Ola de contagios, cuya cepa es más agresiva y resistente.

El IMSS en Apatzingán, esta rebasado en capacidad de atención por COVID-19, por ello, las personas que resultan positivos, los están canalizando a los hospitales de la Ciudad de Lázaro Cárdenas del Río y Morelia, lo que sin duda alguna, viene a generar más gastos, desgaste físico y emocional de familiares de los pacientes.